jueves, 29 de marzo de 2012

La Noche Trans…

Luego de un corto pero relajante baño, un alimento le da la energía necesaria. Una minifalda, blusa corta y tacones la armadura para enfrentar la jornada, no puede faltar el maquillaje, toca estar presentable para las personas que se nos acerquen. El espejo ya gastado por el tiempo muestra claramente donde se debe retocar. Listo, aquella rutina diaria se la realiza sin trabas, toma el bolso, que en su interior tiene lo necesario para su labor. Sale de su hogar, los tacones resuenan en la vereda, un eco muestra lo solitario que luce el barrio, varios minutos pasan y por fin un taxi, hace luces, reduce la velocidad, la mira y arranca sin llevarla. Una señora que apurada pasa a su lado, baja la cabeza y continúa con su trayecto. Por fin un taxi para y le lleva a su destino de trabajo, el conductor no menciona palabra, mira a todo lado, menos al retrovisor y si lo hace son aquellas miradas flash por necesidad, si le pregunta algo, contesta con monosílabos o palabras cortas y cortantes. Al llegar al punto de destino, la transacción se realiza, el pago de la carrera y solo el humo contaminante del escape queda para acompañarle en aquella noche fría. Después de varios minutos, un vehículo se aproxima lentamente, las luces encandilan, su rostro no puede distinguirse, duda, acelera y se marcha. Luego de varios minutos, otro se acerca mas firme, la ventanilla de la puerta del auto se abre y pregunta… ¿Cuánto? Se dice la cantidad y asiente, trato hecho, ella abre la puerta y sube… Pasan varios minutos y regresa nuevamente, al bajarse una señora le grita desde la esquina diagonal que se largue, que ya va a llamar a la policía para que le lleven preso… Ella decide caminar hacia la otra vereda alejándose de la señora. Otro vehículo pasa a toda velocidad con sus ocupantes gritando palabras ofensivas, ella ya esta acostumbrada, pero responde en el mismo tono para no dejarse, la discriminación la vive a diario por el hecho de abandonar el género asignado, por renunciar a su masculinidad. Hay leyes que amparan pero no las conoce y, si las conociera, todavía existen personas que no, así que es una historia de largo final, por lo menos de uno gratificante. Mientras tanto los vehículos seguirán pasando y los insultos también hasta que en mayoría entendamos todo lo que implica la frase “El derecho a la diferencia” o también “Vivir en Armonía”… Frases que las tenemos presentes constantemente, pero ¿En realidad las aplicamos?... Mientras tanto, el primer vehículo que llego con dudas y se alejo regresa y pacta un acuerdo más, ella sube y no regresa… Esperando que le vaya bien en la noche…

 Jorge Santana,
 Activista Intersex,
Carpintersex y La Kolektiva Caleidoscopio.

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